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¿Y si no se va? Cómo protegerte de un inquilino que pretende okupar deliberadamente tu vivienda

Protege tu vivienda. Protege tu tranquilidad. Informa, comparte y actúa.

Con las últimas modificaciones legales en materia de alquiler, muchos pequeños propietarios están detectando un fenómeno preocupante: aspirantes a inquilinos que intentan acceder a viviendas a través de fórmulas más laxas como el alquiler temporal, presentando motivos ficticios de estancia temporal o incluso documentación manipulada.

Detrás de estas prácticas, en muchos casos, hay una realidad social compleja: la escasa oferta de viviendas de alquiler derivada de los últimos cambios legislativos ha llevado a que algunos inquilinos se vean forzados a buscar cualquier vía para acceder a una vivienda, aunque sea de forma poco honesta o directamente fraudulenta.

📝 ¿Qué es esta cláusula y por qué te protege?

Se trata de una herramienta legal simple, pero poderosa: una cláusula de aval que disuade a inquilinos que buscan deliberadamente quedarse en una vivienda indefinidamente, dejando de pagar y evitando el desalojo.

⚖️ ¿Qué la hace especial?

📄 Cláusula que puedes copiar y usar

Puedes añadir la siguiente cláusula a tus contratos de alquiler. Recuerda que tanto el arrendatario como el avalista deben firmar todas las hojas del contrato.

CLÁUSULA DE AVAL PERSONAL SOLIDARIO

Don/Doña [Nombre del Avalista], con DNI nº [DNI], y domicilio en [dirección completa], comparece en calidad de avalista solidario del arrendatario, Don/Doña [Nombre del Inquilino], en el presente contrato de arrendamiento.

El avalista se compromete de forma expresa, solidaria e irrevocable a garantizar el cumplimiento íntegro de todas las obligaciones derivadas del presente contrato, incluyendo pero no limitándose al pago de la renta, suministros, reparaciones por desperfectos, indemnizaciones, gastos judiciales y cualquier otra obligación económica asumida por el arrendatario.

Ambas partes, arrendatario y avalista, responderán de dichas obligaciones con todos sus bienes presentes y futuros, sin limitación temporal ni económica, y hasta la devolución efectiva de la posesión de la vivienda, mediante la entrega de llaves al arrendador y la liquidación total de cualquier deuda pendiente.

El avalista declara conocer y aceptar esta responsabilidad, y renuncia expresamente a los beneficios de excusión, orden y división establecidos en el Código Civil, asumiendo que podrá ser requerido de forma directa por el arrendador como si deudor principal se tratase.

En prueba de conformidad, el avalista firma el presente contrato junto con el arrendatario y el arrendador, aceptando plenamente todas sus condiciones.

🚪 ¿Y si no se va?

Cuando el contrato finaliza y el inquilino no entrega la vivienda, deja de tener derecho legal a permanecer en ella. Pero iniciar un desahucio puede tardar meses, y mientras tanto, tú asumes todos los costes.

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